En el libro de Fred Ritchin, Después de la fotografía, aprendí que la
evolución de le fotografía hacia la era digital puede generar cambios no solo
en el reflejo que este medio tiene sobre la sociedad sino también crear cambios
masivos en la manera en la que se expresa.
En esta lectura se toma el tema
de la fotografía como un ser mecánico, que puede llegar a ser considerado como
perfecto, ya que viene de una maquina y tendemos a sugerir que la maquina es más
inteligente que el ser humano. Dado a esto se ha generado una abstracción de la
realidad. Al inferir esto, el autor nos invita a pensar sobre el código del
ADN, un código genético que puede ser tomado para crear un ser idéntico al
progenitor, y compararlo con el código que se forma al juntar pixeles para
generar una imagen. Teniendo como resultado una ideología de inmortalidad,
trascendencia e infinidad.
Y así como se generan nuevas
ideas de la realidad, Ritchin cuestiona si el ver significa creer. Comenta que
ya que estos nuevos códigos pueden generar imágenes inimaginables, ya no podrá
ser usada para poder probar ni confirmar. Retoma la idea de Sontag donde
menciona que el tomar una imagen es adueñarse del sujeto y así estar en el
poder. Un poder donde se puede controlar la ideología de la sociedad y crear
nuevos mundos dramatizados y digitalizados. Si estas masas dejan de creer
entonces se comenzaran a pasar actos violentos sin ser creíbles así como
viajes, eventos, cuerpos, clichés, turismo, recuerdos.
Una idea fundamental del libro se
encuentra cuando se toca el tema de la memoria. Según Fred, la fotografía ayuda
a que el recuerdo se mantenga y ayuda a que las personas se relacionen entre sí
compartiendo recuerdos. Pero, en lugar de fomentar el olvido, la foto debería
invitar a recordar demasiado. Creo que debería de invitar al espectador a
fomentar su criterio así como su sed para conocer más, esto podría crear nuevos
códigos que a su vez funcionaran con otros para así formar nuevas imágenes, que
el público y el autor podrán descifrar según su propio criterio.
La fotografía, usualmente la
documental, está controlada por mandos altos (el gobierno). Los cuales pueden
controlar el dialogo entre el creador y el espectador. Teniendo como resultado
otro código, el de conducta, ya que el espectador genera una narrativa, la cual
puede invitarlo a buscar aun más información, con la ayuda de la Web (generando
los Hipertextos). No se trata de generar imágenes, sino de saber qué y cómo
filtrarlas para obtener una mejor conciencia o información, nos comenta el autor.
Y así es como se generan la Hiperfotografia,
un término que se refiere a los enlaces entre medios. Esto sí ayuda a la
búsqueda de mas información. Aunque se violan ciertos criterios de derecho de
autor, se puede continuar creando realidades inexistentes.
La fotografía digital se ha alejado del
objetivo que la fotografía análoga alguna vez tubo.
Y así es como debería de ser usado con nuevos
objetivos (claro, no para usos de manipulación como los ejemplos que Ritchin
nos da sobre el gobierno estadounidense). Nos indica que las metodologías de la
tecnología podrían tener cinco nuevos objetivos. El primero, similar al
cubismo, establecer que existe una realidad que no existe en un solo espacio de
representación, pero se necesita entender que sigue siendo manipulada. El segundo,
podría ejemplificar lo que está por venir en un futuro no muy lejano. El tercero,
poder usar al sujeto para ejemplificar un evento, una sociedad o para dejar
algo claro (sin el consentimiento del sujeto fotografiado). El cuarto, poder
hacer un registro honesto que se pueda compartir libremente. Y el quinto, poder
intervenir la ideología y cambiar el uso de la imagen para la manipulación.
Queda claro que mientras la fotografía
y todo lo que conlleva siga evolucionando tendrán que cambiar los derechos de
cada individuo. Fomentar leyes que ayuden a proteger la identidad de cada quien
o incluso protegernos de otros.
Y así, el autor termina haciendo una comparación importante, se establece como es que el mundo llegara a
ser una re-interpretación cuántica del tiempo, la estética y el movimiento,
creando como la física cuántica una serie probabilidades infinitas. Todo esto
variara dependiendo del artista, cuyo campo y habilidad creativa crecerán infinitamente.
Podrá cuestionar o dar respuestas. Podrá dar una alternativa o una sola opción.
Podrá hacer lo que quiera. Todo mientras siga en ese camino hacia la búsqueda de
la realidad de la fotografía, creando.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario